Las 5 cosas que hacer el día de tu embarque

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En este artículo, te presentaremos ejemplos de actividades para realizar en este día único de embarque. De hecho, si tienes la suerte de llegar temprano a bordo del barco, podrás disfrutar de las numerosas instalaciones con menos gente que en los días siguientes. ¡Toma nota y disfruta de tus vacaciones en el mar al 100%!

1. Explora el barco por completo

Explora el barco por completo

El barco será tu próximo lugar de vida durante toda la duración de tu crucero. Vas a pasar mucho tiempo en él y te aconsejamos que te familiarices rápidamente para sentirte cómodo durante todas tus vacaciones. Restaurantes, bares, buffets, salones, casino, piscinas… tantos lugares que frecuentarás varias veces durante tu estancia. El día de tu embarque, no dudes en hacer un recorrido completo del barco y de los lugares de vida esenciales para orientarte bien. Trata de memorizar especialmente las cubiertas donde se encuentran los lugares clave de tus vacaciones, ahorrarás un tiempo valioso en los ascensores y en los pasillos. Tampoco dudes en tomar fotos ya que el barco aún no estará lleno de todos sus huéspedes, tendrás el campo libre para dejar volar tu imaginación.

2. Disfruta de las piscinas

Disfruta de las piscinas

Como te mencionamos anteriormente, el día de tu embarque, podrás disfrutar del barco con poca gente a bordo, especialmente si tienes la suerte de llegar temprano. No dudes en disfrutar de las piscinas del barco para nadar tranquilamente, estarán casi vacías. Pocas personas se apresuran a bañarse el primer día de su llegada. Generalmente, los otros pasajeros están más preocupados por ir a comer al buffet o tomar un cóctel en uno de los bares del barco. La mayoría disfrutará de la natación unos días más tarde, una vez que el barco esté en el mar. Así que un consejo para ti, no dudes en ponerte tu traje de baño, tomar tu toalla y darte un chapuzón, solo en la piscina. Felicidad garantizada, ¡créenos!

3. Come en el buffet

Come en el buffet

Es muy probable que hayas hecho varias horas de viaje en coche o avión para llegar al puerto de embarque de tu crucero con solo un desayuno en el estómago y un café. Si quieres abrir el apetito para satisfacer tu hambre disfrutando de los deliciosos platos servidos a bordo, o no tener un bajón de energía hasta la cena (especialmente si tienes el segundo turno), no dudes en dirigirte al buffet desde tu embarque. Este ya estará bien abastecido con una considerable selección de entrantes, platos principales, postres… todo acompañado de una bebida fresca. ¡Las vacaciones con pensión completa pueden comenzar! También debes saber que muchas compañías abren también sus restaurantes de especialidades desde el primer día, así que si tienes antojo de sushi o de un steak-house, ¡date el gusto!

4. Encuentra tu bar favorito

Encuentra tu bar favorito

A bordo de los barcos más grandes, ¡podrás encontrar hasta una docena de bares diferentes! Desde el piano-bar, pasando por el rock, o incluso el jazz, hay realmente para todos los gustos para tus noches de cócteles en familia o con amigos. No dudes en dar un vistazo a los bares disponibles a bordo de tu barco para ubicar tu próximo lugar de relajación y placer. Los camareros conocerán tus hábitos y, después de unos días, ni siquiera necesitarás hacer tu pedido, ellos lo harán por ti.

5. Relájate en tu cabina

Relájate en tu cabina

Por supuesto, si tu viaje para llegar al puerto de embarque ha sido cansado, podrás descansar y relajarte en tu cabina. Toma una siesta de unos cuantos minutos para recargar energías, luego aprovecha para darte una buena ducha o un baño, dependiendo de la categoría de tu cabina, y familiarízate con tu futuro lugar de vida desempacando tu maleta en los numerosos compartimentos a tu disposición. Así, estarás en forma para tu primera noche a bordo. Si tienes la suerte de poder disfrutar de un balcón en tu cabina, te aconsejamos admirar la salida del puerto, que siempre es un momento bastante mágico.

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